Vaya movida lo de crecer A los millenials nos contaron muchas trolas mientras crecíamos, que si el perro y la mermelada, que si te ponías delante del espejo y decías tres veces Verónica aparecería un espectro y te degollaría en vivo… y las más grande de todas, que nos íbamos a comer el mundo porque éramos la generación más preparada. Y es que claro, creíamos que íbamos a ser como Carrie Bradshaw desayunando todos los días con nuestras amigas en el Vips mientras hablábamos de nuestras exitosas carreras profesionales, y resulta que al final nos hemos convertido en Belén la de Aquí no hay quien viva, luchando por hacernos un hueco en el mundo laboral y poder pagar el alquiler. La vida se me hace bola es la historia de un muchacho que creció en un barrio obrero al sur de Madrid y que en algún momento de su vida se dio cuenta de que las cosas no iban a ser como se lo habían contado. Vamos, que esta es mi historia, Patricia. Si creciste madrugando los fines de semana para ver el Megatrix y por las tardes te las pasabas en el MSN. Este libro es para ti. «Viniste por las risas y te vas a ir con la patata tocada. Bertus consigue el equilibrio perfecto entre un buen puñado de risas y un viaje emocionante hacia al pasado en el que, amigo, te darás cuenta de que ya no eres joven».
Eva Soriano